Por Nino Gallegos, para APIAvirtual.
En el espíritu del tiempo con el cuerpo ocupando el espacio, la pobreza y el hambre, son las guerras sin fin sobre la marcha del cambio climático, regateándole a la economía de guerra una cantidad mínima y miserable para salvar a los pobres del hambre, no haciéndolo en Ucrania como tampoco en la Franja de Gaza.
Al final de la segunda guerra mundial, se consignó: Nunca Más, otra guerra, y la tercera está tocando a la puerta, porque a la tercera es la vencida y la perdida, a plazos del tiempo, porque Ucrania pertenece a Rusia y a pactos del espacio porque Palestina debe ser desaparecida.
Lo que al tiempo y al espacio, el solely, el cuerpo del espacio es el tiempo del Lebensraum, espacial y corporal, el cuerpo es la mente, obedeciendo a la mente insana el cuerpo insano en las operaciones especiales del complejo industrial militar sobre el complejo industrial humano en el fin sin final del siglo xx con el reinicio del siglo xxi con 25 años de una crisis civilizatoria, sobrehumanamente, inhumana, con la caracterización egoprot(a)gónica de Trump, Putin y Jinping en el mundo de las sombras espectrales, no sorprendiendo lo que fue un ensayo de decisiones, actuaciones y disuasiones en los años 2016-2020, iniciando Putin y principiando Netanyahu.
En el tiempo y en el espacio de la recesión en la democracia, la reinstalación de la autocracia que lo fue antes y después de las entreguerras mundiales, el capitalismo del neoliberalismo y el comunismo del autoritarismo, son el consumismo de lujo y funeral, de vigilancia y digital en la oscura, espectral, boreal y austral era nuclear, siendo una crisis de los misiles con la crisis de los drones en sus aproximaciones-disuasiones y guerras-proxy tras Ucrania-OTAN e Israel-USA, no habiendo daños colaterales con los crímenes de guerra y lesa humanidad en Europa del Este y con el genocidio en el campo de concentración y exterminio de la Franja de Gaza-Palestina, bajo los escombros materiales, los escombros humanos.
Del tiempo al espacio, el espíritu y el cuerpo, reproyectados y reconcentrados visual y mentalmente hacia adentro-afuera de la realidad virtual en la entropía del mensaje, es la disuasión y la provocación de una aproximación en la guerra fría-caliente demencial y nuclear en el mundo de las sombras espectrales, reactivando los pros de USA y los contras de Rusia, la proximidad OTAN-USA y China-Rusia, para qué una guerra nuclear cuando las guerras proxy, dejan millonarios dividendos con las armas y magras ganancias con los soldados propios y los mercenarios ajenos, sean los de Wagner y los coreanos del norte, en lo que en el país de las sombras espectrales tenemos policías, militares y narcosicarios como guardaforestales cobrándole piso a los árboles frutales y maderables con los campesinos ejecutados y desaparecidos.
Reacomodándose el tiempo y el espacio con la regresada y venida venérea de Trump con más de sus elucubraciones mentales y eyaculaciones físicas, porque piensa más con la cabeza del pene, Putin con su enanez y Jinping con su largues, el culiempinado del mundo en el mundo de las sombras espectrales, Mussolini con su amante, Hitler suicidado con su niñera sexual, Stalin con su esposa suicidada, la chica desaparecida en el Vaticano de Juan Pablo II y que para el papa Francisco, Emanuela está en el cielo, el mundo arriba y la tierra abajo para que el tiempo de la provocación y el espacio de la disuasión sean las tormentas de mierda, de lodo, y, de sangre con misiles y drones.
