Por Nino Gallegos, para APIAvirtual.
Si Calderón llegó por Fox y Claudia por Obrador, Peña llegó por Televisa, 24 años (de y para) la sucesión presidencial con la marca de la militancia partidista, la alianza o la coalición, se ha llegado al poder, a todo modo, porque la mística y la materialización del presidencialismo es ser y hacer con el poder político y económico, social y cultural lo que para los mexicanos es el presidencialismo: la imagen y la semejanza en que el paternalismo y el autoritarismo se asumen en la aquiescencia con la cultura política de votar para elegir lo más cercano a la conveniencia que a la convicción ciudadana, resultando más la cantidad que la calidad que representa la democracia electoral.
La continuidad y la discontinuidad sexenal presidencial, en su representación, tiene una cualidad con una doble incapacidad: la meritocracia y la mediocracia, con el poder, a todo modo.
Si en el proceso electoral del día domino 2 de junio 2024, se votó para los miles de puestos populares, de la presidenta al-a regidor-a, ¿para qué van a servir los servidores públicos, cuando es y será más evidente la cantidad que la calidad en la supuesta cualidad del oportunismo con la incapacidad particular y general, tanto en la burocracia como tanto en la meritocracia y la mediocracia nacional en la corrupción y la impunidad, en la violencia y la criminalidad en el país de las sombras espectrales?
La siguiente observación de Liliana David, después del proceso electoral:
“Con todo, una vez concluida la contienda político-electoral, que comenzó en septiembre de 2023, Sheinbaum deberá asumir la dirección de un país que afronta muchos retos y promesas que cumplir. La principal será, sin duda, la de atender las demandas de la ciudadanía frente a la violencia e inseguridad que desangra a México, un tema que se mostró capital durante la campaña electoral y fue utilizado por la oposición –sobre todo a partir del segundo debate televisado entre los candidatos– como la principal recriminación al sexenio de López Obrador. El aumento de la criminalidad en el país y la impunidad con la que sigue operando en muchos puntos de su geografía el crimen organizado es desde luego un tema que impondrá a la nueva presidenta una revisión de la agenda internacional, la cual deberá pactar con Estados Unidos, país que se halla inmerso en una convulsa batalla por saber quién ganará las próximas elecciones presidenciales que se celebrarán en noviembre. Mientras que a México ha llegado la primera presidenta del país y de la región, Estados Unidos podría tener el primer presidente condenado”.
En la lógica de la realidad y en la logística de la política, la real-politik, a la mexicana, es a la medida y a la desmedida democracia electoral que la antecede la corrupción y la impunidad, la violencia y la criminalidad en la procesión funeral antes, durante y después del Estado-Obrador y el Estado-Yo Claudia, los “muchos retos y promesas que cumplir” pudieron cumplirse si es que la 4T lo hizo, pudiendo más la cumplimentación de los dineros dados a los mexicanos por los mexicanos a través de Bienestar Social, sin dejar el Estado-Obrador de polarizarlos y confrontarlos con el No Somos Iguales, dejándole el Estado-Obrador al Estado-Yo Claudia muchos más retos de él y muchas más promesas de ella en la continuidad de la 4T con el segundo piso de la discontinuidad, porque lo normal es la a-normalización en cómo la transformación tiene que pasar por la reconstrucción antes de cualquier otra destrucción en los años recientes, pasados y presentes 2018-2030.
La a-normalización de la transformación que ha sido la acumulación y la desposesión desde al diablo las instituciones con los fideicomisos y hasta a la chingada la suprema corte de justicia con el estado de derecho y los derechos humanos, la condición del ser mexicano en los mexicanos, es la soledad en la revolución de las conciencias y el abandono en el humanismo mexicano con la seguridad ante la corrupción y la impunidad, la violencia y la criminalidad, porque el Estado-Obrador ha dicho que los muertos y los desaparecidos le llegaron de Calderón y que al Estado-Yo Claudia, ni siquiera los ha visto llegar porque todavía es la presidenta electa-virtual.
De la continuidad a la discontinuidad será posible saber y conocer si al pueblo se le regresó lo robado, lo mentido y lo traicionado, invocando textualmente aquí lo que para Jean Luc Nancy es lo que fue y/o era el pueblo:
“Si ya no sabemos qué es democracia, significa que esta palabra ya no tiene sentido. Sabemos qué son el estado de derecho, los derechos humanos, las libertades fundamentales, el principio de igualdad… pero democracia significaba otra cosa: una sociedad donde estas definiciones formales eran reales y donde el poder era capaz de aplicarlas para el pueblo y por el pueblo”.
Lo que se sabe y conoce es que lo de la democracia y el pueblo, fue hace tiempo con los griegos, y entre la continuidad y la discontinuidad, los romanos, corrompieron la democracia con el pueblo, hasta que llegó el Estado-Obrador Primero, (sin ser un primer presidente acusado o condenado) e impuso liberal, autoritaria y conservadoramenteque la democracia era del pueblo y para el pueblo para cuando llegue el Estado-Yo Claudia, él, diga: Misión Cumplida.
Y si el Estado-Yo Claudia, le pide que regrese, él se regresa echo La Chingada.