Por Nino Gallegos, para APIAvirtual.
Los pensamientos y las palabras, los actos y los hechos en el país de las sombras espectrales, si sobran no hacen falta, porque para las promesas hay dinero para las campañas y para quien llegue a la Presidencia como Presidenta, porque no fue lo mismo cuando el Presidente saludó a doña Consuelo, cuando es diferente que Claudia abrazó a C. Cárdenas, quedando los balazos para la procesión funeral al proceso electoral.
Las buenas intenciones son las malas transiciones desde que a alguien no le importa nada de nadie, es el sentido y el bien común los que nos trae y nos pone en donde estamos y a donde vamos con la liberada aquiescencia que la indecencia no se lleva con la dignidad, por más machista que sea la Presidencia, mujer será la Presidenta, porque no se trata(rá) de la violencia política de género, sino, de los muertos, los feminicidios y los desaparecidos en el mejor matriarcado y en el peor patriarcado con el sentido y el bien común de lo mexicano en l@smexican@s.
El no ha sido poca cosa para la cantidad en la procesión funeral ante la calidad para el proceso electoral, sirviendo para la podredumbre de la política y para la pobredumbre de la economía en el SuperPeso sin contrapeso, a reserva de las reservas petroleras para ofrecer el oro y el moro con el becerro de oro en los rastros íntimos y en los mataderos públicos, buscando la mamá vaca de la historia patria con la madre buscadora al padre del Estado-Obrador para darle La Pala del Mando Presidencial antes de que vaya, por una de las tantas salidas que tiene como cerco viejo,a La Chingada.
No ha sido poca cosa en tan escasa cosa como la 4T para llegar al desfiladero abismático con la procesión funeral por el proceso electoral llevando a cuestas el encargo de la revolución de las conciencias y el humanismo mexicano para toparse, con la puerta Mariana, cerrada por a-dentro, en el Palacio Nacional, custodiándola la historia patria con la democracia prostibularia violada por a-fuera que, sin querer darse cuenta amuralla el Palacio y edifica las obras insignia con la señal del desarrollismo por sí mismo del presidencialismo liberal autoritario conservador, agachándose con Trump, “rebelándose” ante Biden y simpatizando con Putin, no siendo nadie en el exterior cuando es alguien en el interior que es en el país de las sombras espectrales.
No ha sido poca cosa la premeditación, la alevosía y la ventaja en la popularidad mediática del Estado-Obrador con el favor de la gente en serse más cantidad que en hacerse menos calidad, tanto en lo alto del templo de la adoración como en lo bajo del sacrificio en el suelo de la corrupción y la impunidad y en la sangre de la violencia y la criminalidad.
No ha sido poca cosa lo que está haciendo el INE contra la campaña sucia que no es la guerra sucia, porque la del narcosicariato es sanguinoviolenta y criminal, y sí es la tormenta de mierda, de lodo y de sangre sobre y entre los liberales autoritarios y conservadores con l@s presidenciables en la procesión funeral al proceso electoral para llenar, contar y vaciar las urnas funerales-botados y electorales-votados (de y para) la prostibularia democracia mexicana 2024. No ha sido poca cosa lo que el Estado-Obrador es y hace con el aparato de Estado de la 4T y Morena que son en el país de las sombras espectrales, apuntándole y anexándole con la valoración crítica de Louis Althusser, lo que para la ignorancia futura de Benito Juárez no le alcanzó desde el saber pasado en el presente con AMLObrador: “El Estado como agente represor, tiene en su poder el monopolio legítimo de la fuerza y que a su vez lo hace legítimo, describiéndose a sí mismo como eterno y lo reproduce en la infraestructura, que a su vez le dará el poder legítimo que tiene”, el Estado-Obrador, que no es represor y sí es liberador, autoritario y conservador con la mafia o la cúpula del poder que es en la política y en la economía, Mr. Carso-Slim por adentro y Don Salinas Pliego por afuera, el Ejército administra la infraestructura, la legitimidad está ganada contra la corrupción que no da para la eternidad y sí para la impunidad; todavía así, el poder, a todo modo, legítimamente, metaconstitucional, por arriba y por abajo de la Ley en el suelo de la violencia y la Justicia en la sangre de la criminalidad, al final sinfinal sexenal, fue, es y será la réplica de la investidura presidencial desde la Historia Patria, porque, no ha sido poca cosa la 4T para la continuidad sexenal-presidencial.