Por Olga Laura Ochoa
Fuentes: //cimacnoticias.com.mx
Ciudad de México.- Mujeres feministas de diversos ámbitos se reunieron a debatir sobre una pregunta a la que respondieron desde sus distintas aristas y lo hicieron porque esta interrogante está latente ante la elección histórica que México está a punto de vivir en materia democrática, es por ello que las expertas respondieron a:
«¿en qué medida contar con una mujer en la Presidencia se traduciría en avances en la agenda feminista, de derechos humanos y de justicia con perspectiva de género en México?»
La charla fue moderada por Stephanie Brewer, directora para México de la oficina en Washington para asuntos latinoamericanos (WOLA), con la participación de tres activistas de organismos de la sociedad civil; siendo éstas: Rebeca Ramos, directora ejecutiva, Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE); Yésica Sánchez Maya, equipo directivo, Consorcio Oaxaca; y, de Maïssa Hubert Chakour, subdirectora ejecutiva, EQUIS – Justicia para las Mujeres; quienes iniciaron un diálogo para ahondar en dicha problemática.
Todas ellas coincidieron en la importancia de apostar por el diseño e implementación de políticas públicas de largo aliento es el llamamiento de las agendas feministas. Construir una nueva relación con el Estado mexicano a través del planteamiento de los retos, la construcción de puentes de escucha y aprendizaje en conjunto. Y, tener como meta la medición, avance y visibilidad de los temas, es el desafío planteado por activistas en el que intentaron responder la pregunta:
La conversación
La conversación, comenzó con el convencimiento de que aunque son muchas, diferentes y complejas temáticas por abordar, es necesario, plantear y replantearse, las asignaturas pendientes, así como sus posibles soluciones a con programas a largo plazo que, de verdad, logren impactar en las personas y en sus derechos fundamentales. También, se llegó al convencimiento de que dichas tareas corresponden al Estado mexicano en su conjunto, y la responsabilidad se tiene que abordar desde los tres niveles de gobierno: federal, estatal y municipal.
Rebeca Ramos, directora ejecutiva, Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), puso el enfoque en términos de los derechos reproductivos de las mujeres, considera que aunque ha habido avances en términos de los criterios de la jurisdicción de las sentencias de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, un gran pendiente sería homologar esos criterios a todo el territorio nacional, para avanzar en la despenalización total del aborto.
“Seguimos teniendo un país en donde en un estado, interrumpir voluntariamente tu embarazo es considerado un delito; y en otro lugar, existe una obligación por parte de las instituciones de salud de proveer estos servicios de manera gratuita y segura”, destaca. Considera que tener acceso gratuito a la salud reproductiva, contar con presupuestos más altos y que las autoridades pongan énfasis en la atención de las mujeres, sería el mejor de los escenarios posibles.
En otro orden de ideas, Yésica Sánchez Maya, equipo directivo, Consorcio Oaxaca, compartió que el reto que tiene quien llegue a ser presidenta, consiste en cómo garantizar el tema de la paridad, visto como un tema fundamental y no de simulación, “cuando nos referimos a esto es porque lo hemos visto, como se rellenan espacios con mujeres pero no se les da el poder, tanto en la toma de decisiones como en el manejo de los recursos”.
Habló de diferentes problemáticas en las que se requiere tomar acciones para erradicarlas, tales como la violencia en contra de las mujeres; la tortura, siendo un tema de derechos humanos; el derecho a la pensión alimentaria, por parte de los hijos. Y, señaló que lo importante para vencer tantos problemas estructurales en la impartición de justicia, tendrá que ver con que se logre un enfoque diferenciado en cada tema.
Mientras tanto, en su participación, Maïssa Hubert Chakour, subdirectora ejecutiva, EQUIS – Justicia para las Mujeres; destacó tres temas pendientes de la agenda. Si bien, como sus compañeras activistas, reconoció el hecho de que llegue por primera vez una presidenta al país, resulta importante por el simbolismo en términos de democracia, no necesariamente, garantiza el acceso a una agenda feminista.
La activista enfatizó que lo importante es reflexionar en los cómos, en cómo construir programas, propuestas y agendas, “un tema preocupante es la crisis de violencia en México, el tema de violencia de género que si bien no viene desde este sexenio, se ha agudizado”
Recordó que de acuerdo a encuestas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), entre 10 a 11 mujeres son asesinadas todos los días en nuestro país, y que, siete de cada 10 mujeres de más de 15 años han experimentado, al menos, una situación de violencia a lo largo de su vida.
La moderadora, Stephanie Brewer, expuso: “se van a celebrar elecciones más grandes en la historia de México, con más de 20 mil cargos de representación en los tres niveles de gobierno; federal, estatal y municipal, incluyendo a la nueva presidenta del país”, refiere, que al ser las dos punteras en las preferencias electorales mujeres, se presupone que finalmente México tendrá una mujer presidenta, lo que en sí resulta un logro, tanto a nivel simbólico como de expectativas de los logros o avances que se podrían alcanzar en la construcción de la agenda de los derechos humanos y de las mujeres.
Prosiguió su discursiva, en las elecciones mexicanas del próximo 2 de junio, el país podría elegir a su primera presidenta. En este webinar, las panelistas, integrantes de organizaciones feministas mexicanas, compartieron su análisis sobre el significado de una presidencia de una mujer para la agenda de los derechos humanos, especialmente para los derechos de las mujeres.
Temas tan variados, como la violencia en contra de las mujeres, la implementación de las leyes generales contra la tortura fueron parte de su discurso, “cuando hablamos de la agenda feminista y de los derechos de las mujeres esa agenda no se limita a temas como la violencia contra las mujeres, en sí, sino de muchos de los problemas estructurales y prácticas violatorias de Derechos Humanos que vemos en el país”.
Realizaron un llamamiento a plantear políticas de atención a la violencia de manera preventiva, desde una perspectiva más amplia y con altura de miras, no como sucede actualmente, en la que solo se castiga como delito cuando ya está consumado, como es el caso de los feminicidios; “necesitamos complementar con un sinfín de recursos psicoemocionales y económicos, que muchas veces las mujeres no tienen y el estado no pone a su disposición”.
La moneda está en el aire
Resulta un hecho que en el discurso de ambas candidatas, proclives a convertirse en la próxima presidenta del país, está presente la agenda de las mujeres y de los derechos humanos. La verdadera expectativa de las activistas, reside en ver cómo se aterrizan las diferente problemáticas abordadas, en cómo se logra una escucha activa que se traduzca en avances sustanciales y medibles que abonen a los temas citados en la charla.
Mientras tanto, la temática de las mujeres y de los derechos humanos ya, es reconocida y aceptada por las contendientes, la candidata a la Presidencia de la República de la coalición Sigamos Haciendo Historia, integrada por Morena, el partido Verde Ecologista (PVEM) y el partido del Trabajo (PT), Claudia Sheinbaum Pardo, tras obtener su registro en el Instituto Nacional Electoral (INE), señaló en su discurso:
“garantizar la igualdad sustantiva de las mujeres y nuestro derecho a una vida libre de violencias”, además, dijo: “La nueva etapa de la cuarta transformación, tiene rostro de mujer y significa seguir construyendo el futuro para las nuevas generaciones, con la esperanza y el esfuerzo colectivo en el presente”.
En el otro lado de la arena política, la candidata a la Presidencia de la República por la coalición Fuerza y Corazón por México, integrada por, el partido Acción Nacional (PAN), partido Revolucionario Institucional (PRI) y por el partido de la Revolución Democrática (PRD), Xóchitl Gálvez Ruiz, expuso durante su cierre de precampaña, que creará el Sistema Nacional de Cuidados, porque se necesita apoyar a las mujeres para que se integren a la vida laboral. Además, se pronunció por todas las mujeres que son víctimas de violencia a diario y, advirtió: “ningún violentador al poder, ni una más, ni una menos”.
A lo largo de la charla planteada por WOLA, se plantearon asuntos de fondo en el tema de justicia con perspectiva de género, llegando a una conclusión: el ejercicio de democracia no se limita al ejercicio electoral, el verdadero reto consiste en plantearse los temas de la agenda, en buscar como aterrizarlos de una manera efectiva. Pero sobretodo, en mantener un diálogo constante, que permita seguir construyendo, replanteándose y reformulándose, tanto los diagnósticos, la implementación y los logros que lleven a la consolidación de la equidad con perspectiva de género.
WOLA es una organización líder en investigación y defensa de los derechos humanos en las Américas, que brinda acompañamiento a la sociedad civil para buscar hojas de ruta, o caminos, que les permitan transitar hacia un mejor lugar.