Por Nino Gallegos, para APIAvirtual.
Maité Campillo en “A qué le tiras cuando sueñas proletario”, expone la situación Latinoamericana, y en la condición de México que es en el país de las sombras espectrales, sintetiza:
“Eso pareciera por igual cuando el pueblo trabajador mexicano votó a Andrés Manuel López , el énfasis de su discurso motivó y sensibilizó sin duda alguna en temas como la corrupción o la distribución de la riqueza en retórica del enojo, pero cinco años después a pesar de haber hecho ciertas reformas en sanidad, educación, transporte, cultura –de haber ido mucho más allá sin lugar a dudas que otros presidentes del mismo continente– la corrupción y la distribución de la riqueza es prácticamente la misma de cuando gobernaban los anteriores presidentes aunque reparta más caridad. Las mafias siguen pululando a su antojo controlando la droga y parte de las economías locales, la riqueza sigue en las mismas manos pagando sueldos de miseria a los trabajadores y ni una sola fábrica ni una sola cadena de alimentación ni la tierra ha pasado a manos de quien la trabaja. Las religiones siguen con el mismo poder autoritario corrompido de privilegios, el ejército de casta sigue establecido a su anchas manejando los hilos el mismo de siempre al igual que la policía corrupta haciendo y deshaciendo a su antojo en las calles. En definitiva y pese a los cambios citados, el mismo sistema económico represivo sigue en vigor, las mismas instituciones políticas de Estado las mismas de siempre”.
La situación-condición política, electoral y funeral de y en México, no es exclusiva y sí es privativa porque priva la vida con los muertos, los feminicidios y los desaparecidos, sea o no, el Estado-Obrador, narco, el narcosicariato es real y mortal porque no hay tiempo presidencial para la violencia, tomándoselo-a los sacerdotes para una negociación pro-por la paz territorial y sepulcral.
El esfuerzo sacerdotal, no es la excomulgación papal con la mafia italiana, dejando que la negociación sacerdotal-narca en el país de las sombras espectrales, al menos o al más, muestre las escasas buenas intenciones, aunque sean más las malas intenciones, las oraciones sacerdotales ni para una narca-exorcización alcanza el agua bendita cuando lo que sobra es la sangre para un baño de sangre con el pueblo, porque si la mafia italiana no mata en domingo, el narcosicariato mexicano mata toda la semana para el cementerio del campo santo de los enfosamientos que encuentran las mujeres rastreadoras con las mujeres buscadoras, pues para el Estado-Obrador nomás se andan en la politiquería como también lo hacen los padres y las madres con los hijos desaparecidos de Ayotzinapa, en que el bien del mal solamente se diferencian en quien bien muere para la Iglesia y mal muere para el Estado, sea de laicidad y de gratuidad, el Estado-Obrador es el cancerbero-Xoloitzcuintle de los rastros íntimos y de los mataderos públicos, ladrando rabiosamente desde las tempraneras mañaneras a las tardías adormideras.
Tal vez sí o quizás no, Maité Campillo, no estuvo en el país de las sombras espectrales como paraverse en la polarización-confrontación con los periodistas de izquierda y derecha liberales autoritarios y conservadores, pues cuando Inna Afinogenova, sí estuvo colocada frente al Estado-Obrador, lo exprimió como un limón, la verdad se dijo cuando se escuchó la mentira; la entrevista, hecha, a modo, no le chupó todo el poder al entrevistado (de y en) el Palacio Nacional, pues al buen simulador, mal entrevistador-a en el montaje Afinogenova-Obrador, al estilo periodístico oportunista y estúpido como Latinus y RT, asistida Afinogenova por Jesús Ramírez y El Fisgón Barajas y asesorada por Pablo Iglesias y Juan Pablo Monedero.
Clara Jusidman en “Construyamos una nueva casa común con paz, seguridad y justicia”, advierte y exige:
“Es urgente que reconozcamos que nuestra casa común está en grave riesgo de derrumbarse por las violencias, la polarización y la profunda desigualdad”.
Es para escucharse las voces del eco-papa Fco. y del activista Sicilia por la justicia transicional, ante todo-s, la ausencia del Estado de Derecho y la violencia en los Derechos Humanos que Clara-mente Jusidman pone en juicio crítico ante el pensamiento único liberal autoritario y conservador del Estado-Obrador en la 4T con Morena, la acumulación y la desposesión, la corrupción y la impunidad, la violencia y la criminalidad, la guía ética y la cartilla moral, la revolución de las conciencias y el humanismo mexicano que han sido lo más caro con las grandes obras de la ingeniería del complejo-acomplejado industrial militar con la guardia nacional de hombres y mujeres semianalfabetos funcionales y digitales echándole la mano militar a los jóvenes construyendo el futuro de México sobre el campo, al descampado, de los masacrados por el Ejército y el Narcosicariato mexicanos, abandonando en lo que CJ observa:
“Las instalaciones de energía de esa casa están llenas de cortos circuitos, por sus tuberías corre sangre y en sus cimientos yacen miles de cadáveres producto de muertes violentas, feminicidios, suicidios de jóvenes, muerte y desaparición de migrantes”.
Aunque parezca una necedad contagiada por el Estado-Obrador, a uno como objetor ciudadano en la cantidad, la necesidad y la calidad que la Ley y la Justicia no han cumplido el Estado-Obrador, la 4T y Morena para la mayoría de los mexicanos, porque, No Somos Iguales, lo que es la posición y es la oposición, la polarización y la confrontación, están generándose, para el proceso electoral y la procesión funeral, -la oposición a la oposición-, porque no es lo mismo la narcapresencia que una marcha cívica, a condición de que y en la medida en que, el Estado-Obrador, siga como el Gran Elector en la Elección de Estado con la Ley y la Justicia liberal autoritaria conservadora con el poder, a todo modo, en que La Redacción piensa, escribe y redacta como resultado de una lectura en un “Discurso de la servidumbre voluntaria” de Étienne de La Boétie:
“Los representantes del pueblo no se perciben como peones del ‘pueblo’ sino del sistema (de ahí las revueltas reaccionarias antisistema). Caminamos a una democracia desideologizada (por eso da igual decir hoy lo contrario de lo que se dijo ayer, las ideas son irrelevantes) en la que los políticos son sustituidos por expertos que administran y optimizan el sistema. Ese es el motivo por el que los representantes y los propios partidos políticos se hacen superfluos abriendo el camino a individualidades que los sustituyen (tipo Trump, Milei, Putin, Bukele y tantos otros)”, como el Estado-Obrador manifiesta:
“Queda de manifiesto que vivimos en un país libre. En una dictadura no se podría ni hacer movilizaciones ni tampoco insultar al presidente. Me consta. Es distinto, ya no hay represión ni censura”:
Nomás: “Alcahuetes”.
O la servidumbre voluntaria de la izquierda y de la derecha, agarrando Agripina por los frentes fríos, y no, por las tormentas invernales de mierda, y por si salpican se cubre con la bandera nacional y se va mandando a La Chingada a otra parte que es la quinta de la Historia Patria junto con la Democracia en el qué país es este.