Por Nino Gallegos, para APIAvirtual.
La situación y la condición, la identificación y la posición (de y en) la condición humana palestina, tratada de manera sobrehumana e inhumana desde que “Jericó fue la primera ciudad atacada por los israelitas tras cruzar el río Jordán y entrar en Canaán”, lo que para la Biblia, la Historia y la Arqueología siguen siendo y haciendo en lo que el Estado Sionista de Israel y Hamás se ocupan en la colonización y en la de(s)colonización por la vía de las armas, la guerra no es religiosa porque es militar, territorial, sobreentendiendo de manera sobrehumana e inhumanamente Netanyahu que Hamás se excedió y que la venganza israelí se ha excedido, no como los nazis con los judíos, aun así el derecho a defenderse con el blindaje de USA, la Comunidad Internacional y la ONU, pasan de testigos con la ética y la moral del juicio en Núremberg y la Corte del Derecho Internacional de La Haya que Himmler exigía: tratar sobrehumana e inhumanamente a la condición humana, el nazismo contra los judíos y el sionismo contra los palestinos, lo que para los estudiosos de la Biblia, la Historia y la Arqueología están siendo y haciendo ante los escombros humanos las observaciones pertinentes de manera sobrehumana e inhumana en el siglo xxi, en la Franja de Gaza, porque así como observa críticamente Michael Waltzer: “Los actos de Estado también son actos de personas en particular y, cuando adoptan la forma de guerra de agresión, las personas en particular incurren en responsabilidad criminal”. -Y sobre los criminales de guerra-, “sabemos dónde tenemos que mirar si queremos hallarlos, solo es preciso que estemos dispuestos a mirar”, ¿desde Núremberg o desde La Haya, desde USA, desde la ONU, desde la Comunidad Internacional, desde el mundo de arriba, desde el cielo de en medio, desde la tierra de abajo?
Desde la visión crítica de “La industria del Holocausto. Reflexiones sobre la explotación del sufrimiento judío”, Norman G. Finkelstein, pone y expone la explotación humaniutilitarista del sufrimiento judío:
“Lamento profundamente que la industria del Holocausto haya corrompido la historia y la memoria para ponerlas al servicio de una estafa”.
Estafa,la cual USA, Alemania, la Comunidad Internacional-OTAN y la ONU convalidan en el derecho a defenderse desde cuándo y no tiene para cuándo el humaniutilitarismo sionista acabe con los palestinos, porque está defendiéndose de los terroristas de Hamás, la extensión de la guerra es la expansión territorial y el mortal desplazamiento fuera de la Franja de Gaza-Palestina, teniendo que cargar los palestinos con los huesos cardios, los corazones y las memorias de la Palestina bíblica, histórica, arqueológica y humana.