Por Agencia de Noticias SERVINDI
A diferencia de los ricos, las personas en situación de pobreza podrían necesitar más de una década para recuperarse de los impactos económicos producidos por la pandemia.
Mientras que millones de personas en situación de pobreza continúan padeciendo en medio de la pandemia, los megaricos ya recuperaron sus pérdidas económicas y siguen acumulando riqueza.
Así lo revela un reciente informe de la organización Oxfam titulado “El virus de la desigualdad”, que muestra el impacto diferenciado de la pandemia en las personas según su condición económica.
El estudio asegura que las personas en situación de pobreza podrían necesitar más de una década para recuperarse de los impactos económicos de la crisis.
Y ratifica a América Latina como la región más desigual del mundo, ya que, mientras sus 69 mil millonarios aumentaron su fortuna desde marzo de 2020, unos 25 millones de latinoamericanos cayeron en pobreza.
Virus de la desigualdad
El informe “Virus de la desigualdad” contiene 85 páginas y fue publicado el 25 de enero por Oxfam, luego de haber entrevistado a 295 economistas de 79 países.
En el documento, la organización revela que la pandemia COVID-19 tiene el potencial de aumentar la desigualdad económica en prácticamente todos los países del mundo al mismo tiempo.
De darse esta situación, se trataría de un hecho “sin precedentes” nunca antes visto desde que se tienen registros de desigualdad, es decir, desde hace más de un siglo.
El aumento de la desigualdad, agregan, podría provocar que la humanidad tarde como mínimo 14 veces más en reducir la pobreza hasta el nivel previo a la pandemia.
Esto, en comparación con los nueve meses que han tardado las mil personas más ricas del mundo —en su mayoría hombres blancos— en recuperar sus riquezas.
La crisis actual afecta principalmente a las mujeres y a los grupos étnicos y racializados en situación de exclusión.
Ello, “debido a que tienen más probabilidades de verse arrastrados a la pobreza, pasar hambre y no tener acceso a servicios de salud”, dijo Gabriela Bucher, directora ejecutiva de Oxfam Internacional.
La región más desigual
El nuevo informe de Oxfam revela también que América Latina continúa siendo la región más desigual del mundo.
Ni la pandemia evitó que los 69 mil millonarios de esta región aumentarán sus fortunas: desde marzo de 2020, estas se incrementaron en 104.100 millones.
Esto, mientras unos 25 millones de latinoamericanos caían en pobreza a causa de la COVID-19.
En una entrevista con la agencia Efe, el director de Oxfam para América Latina y El Caribe, Asier Hernando, dio algunas ideas sobre la abismal diferencia entre ricos y pobres de la región.
“Con las ganancias que las 69 personas más ricas de América Latina han hecho durante la pandemia se puede financiar el 50 % del presupuesto de los países en salud”, señaló.
Además, indicó que la cifra obtenida por los mil millonarios de la región sería “suficiente” para que cada una de los 25 millones de personas que cayeron en pobreza, reciba un cheque de 4.000 dólares.
Economía más justa y sostenible
Para la Oxfam, la crisis generada por la pandemia COVID-19 revela el fracaso del actual sistema económico global.
“Esta crisis ha dejado al descubierto los problemas de nuestro fallido sistema económico global, así como otros tipos de opresión estructural que permiten que una pequeña élite prospere”, indican.
Frente ello, la organización recomienda en su informe “construir una economía más justa y sostenible al servicio de todas las personas”.
“No podemos volver al mundo brutal, injusto e insostenible en el que vivíamos antes de la irrupción del virus”, señalan. Esto, agregan, permitirá construir un futuro “que no esté dirigido por los más ricos, sino de manera colectiva por una gran diversidad de voces” y sostenida en “los principios de la democracia y los derechos humanos”.