Por Martin Casildo Flores
“Fue aprobada ilegalmente” afirmó este 20 de marzo Rubén Albarrán, vocalista del grupo Café Tacuba, refiriéndose a la anticonstitucional reforma promovida por el copetón y apoyada por la cámara de diputebrios el día 5 del mismo mes. Ley con que el estado da un nocaut directito a los derechos que este amado pueblo tiene sobre el agua de su territorio.
Si bien es cierto que hacía falta regular el consumo desmedido de agua por parte de la sociedad mexicana, también es cierto que dicha reforma es un falso intento del gobierno por asegurarnos el abasto del líquido vital. Lo que si tenemos asegurado es una mañosa estrategia del ejecutivo cuyo fin es convertir paulatinamente el suministro de agua en un negocio que favorezca no solo a las embotelladoras y refresqueras, sino también al resto de la industria, que es históricamente, el sector de consumo que más litros contamina.
Y como siempre: nada pa´l jodido. Pues la lógica de mercado hace necesario poner en manos de la CONAGUA pues “la definición del porcentaje de participación privada en los proyectos de infraestructura, explotación, distribución, facturación y cobro de agua potable al usuario final, de acuerdo con un reglamento interno al que los legisladores no tienen acceso.” O sea como ya dijimos ¡privatizarla!
Cabe hacer notar que es muy probable que próximamente nos veamos en un enorme problema de inestabilidad social pues, como ya todos sabemos, el deterioro ambiental provocado por la mano del hombre ha ido limitando cada vez más nuestro acceso (y el de otras especies) al indispensable líquido, y esto en algunas otras partes del mundo ya ha sido motivo de guerra. Y a nadie le gustan las guerras ¿verdad? A excepción del Tío Sam, claro.
Si por alguna extraña razón nuestros mandatarios recuperaran un poco del sentido común que su ambición les robó, quizás entenderían que esta vez sí se volaron la barda y frenarían un poquito sus reformas retrogradas. Pero como sé que esto no va a pasar, mejor difundamos los llamados de resistencia como los que puedes encontrar en la ONG aguaparatodos.org.mx para participar en las movilizaciones y programas contra la nueva legislación y no permitir que la clase política y las corporaciones se adueñen de estas bendiciones que nos ha dado la naturaleza. Y por último como dijo el buen Rubén en su video: “Somos agua, somos tierra y somos aire, debemos defenderlas”.