Por Carmen Escalante
“Si vamos a evaluar, por Peña hay que empezar” “Necesario, necesario, evaluar al Secretario” Estas y otras consignas se comenzaron a escuchar alrededor de las 8 de la mañana en el monumento a la revolución en la ciudad de México.
La convocatoria para el paro del pasado 24 de junio hizo eco en cerca de mil escuelas en Iztapalapa, de nivel básico, las secciones 9, 10, 36, así como maestros del Estado de México, de Guerrero, Oaxaca, Michoacán y Chiapas, entre otras se hicieron presentes.
La Coordinadora de maestros, daba las indicaciones para avanzar ordenadamente y al transcurrir las horas más docentes, se integraban a la marcha. Cerca de 6000 maestros integraron el total del contingente.
Salieron a las calles para expresar su indignación por la mal llamada reforma educativa, los maestros quieren que los padres de familia se enteren y entiendan la serie de arbitrariedades e ilegalidades en que incurre la “deforma educativa”, algunos preocupados expresaban “Pueblo no nos juzgues, únete a la lucha, Peña gastando y el pueblo pagando”.
La Reforma Educativa propone una evaluación punitiva, no integral, que incluye, la aplicación de exámenes que no quedan muy claros en su formato, mal diseñados, con faltas de ortografía y de redacción, en salas de cómputo donde el internet falla en todo momento, en la recepción de la señal.
A los docentes les está llegando un correo electrónico de notificación, donde se les refiere que han sido elegidos para presentar el examen que se ofrece de tipo “diagnóstico”, el documento, si es que así se le puede llamar, termina con una indicación en la cual se deja claro que en caso de no presentarse a la sede asignada, se darán por terminados los efectos del Nombramiento sin responsabilidad para la autoridad educativa. Esto tiene a los maestros desconcertados “No hay una información certera, nos la cambian a cada rato, los directores no saben nada, no nos llegó a todos en la misma escuela, esto lo hace el gobierno para dividir”.
Ante las consignas “Descuento, descuento, nos llegará el descuento, no importa no importa, comeremos muchas tortas “el profesor Carlos comenta:
“Nos preocupa el descuento, la gente piensa que venimos y que nos siguen pagando, que somos unos flojos, venimos desde temprano, aún con todo el papeleo administrativo que tenemos que entregar, estamos defendiendo nuestro trabajo, esta no es una reforma educativa es una reforma laboral”.
La plancha del Zócalo de la Ciudad de México no estaba disponible para los maestros, cientos de granaderos les impidieron el paso, causando que realizaran el recorrido por el circuito exterior, para posteriormente llegar a las oficinas de la SEP, donde se pediría una audiencia para continuar las negociaciones a favor de los derechos de los maestros.
“Estamos luchando por la educación, de aquí al 2020 nos van a sacar a todos, no están respetando antigüedad, si la reforma se aprobó hasta el 2013 nos están metiendo a todos en el mismo paquete de evaluación, a los nuevos y a los que ya tienen antigüedad, además, un docente es más que una evaluación mal diseñada, ¿cómo nos califican control de grupo, resolución de conflictos y la parte de socialización en el salón? A los maestros ahora nos están tratando como criminales y los que están aprobando las leyes en contra también tuvieron maestros” expresó Antonio, maestro de Ixtapaluca.
No estamos en contra de ser evaluados
Los maestros coinciden en que no están en contra de una evaluación “No estamos en contra de actualizarnos, de evaluarnos, de tomar cursos, pero para mejorar, para avanzar de veras, no nos dan las condiciones de trabajo y muchas veces nosotros ponemos material, no hay luz en muchas escuelas de Iztapalapa, las tablets que dieron para quinto año por ejemplo, están inservibles, necesitan códigos que no tenemos y en las líneas de ayuda no nos contestan ¿porqué no evalúan eso?, nosotros no queremos afectar a nadie, pero estamos en nuestro derecho de defender nuestro trabajo ¿cómo voy a enseñar a mis alumnos a defender sus derechos si yo mismo no defiendo los míos?”.
