Por Melchor López
En la exposición Hilando Memoria, Tejiendo Justicia, “se cuenta la vida y sueños de mujeres; cada puntada es un acto de dignificación de su vida y un ejercicio colectivo entre Las Siemprevivas y las madres de nuestras compañeras víctimas de feminicidio que nos han contado quiénes son sus hijas, así como de mujeres sobrevivientes de las violencias feminicidas y las madres de nuestras compañeras desaparecidas”.
Yeritza Bautista Cortés es sobreviviente de intento de feminicidio por parte de su expareja íntima. Después de un largo proceso jurídico en el que se logró mantener en la cárcel a quien le violentó, participa en esta exposición con un tejido.
—Yeri, ¿cómo se llama tu tejido?
—Reconstrucción.
—Nos puedes explicar.
—Mi manta, el hilo, la aguja, mi bordado encierran mi historia, mi memoria, un pasado que no intento borrar; un pasado que me ha ayudado a transformar, a crear y bordar un futuro con la paz como conjuro.
Yeri, siempre acompañada de familiares y colectivas feministas, mantuvo la denuncia y, después, se volvió activista. Parte de su historia están en su tejido: “Bordo en ella el mensaje sin letras que, ‘SI SE PUEDE’. El dolor no se queda, transita. El miedo me acompaña, pero ya no me dirige. Reconstruirme todos los días hasta que el aliento se me termine.
—¿Qué impacto crees que tenga en el espectador?
—Anhelamos que se cree conciencia. En la sociedad nos falta empatía, respeto, pero sobre todo conciencia. Nos estamos volviendo insensibles porque morir, desaparecer, sufrir intento de feminicidio se ha vuelto muy normal, no solo en México si no en el mundo; y de esta manera hacerle saber al sistema y al Estado que callar hoy ya no es opción.
—Como sobreviviente de intento de feminicidio, ¿qué le dirías a la gente para ir a ver la exposición?
—Que esperamos puedan leer nuestras historias en cada puntada. Porque no sólo es la manta bordada: es el proceso, el dolor y cansancio que implicó recordar. Y que puedan entender que las mujeres que bordamos esas mantas abrazamos tiempos mejores y creemos que eso también lo tejemos en sociedad.
—¿Cómo se alivia el ser participante en la exposición Hilando Memoria, Tejiendo Justicia?
—Me ayuda a reescribir la historia, desde otro ángulo, y que se pueda saber que no solo somos, o fuimos, mujeres víctimas de un delito, sino que somos mujeres en pie de lucha con planes y sueños. La exposición estará hasta febrero del 2023, en el Centro Cultural Universitario, Tlatelolco, en la Ciudad de México. Se inauguró el 25 de noviembre de 2022, en el marco del Día Internacional de la erradicación de la Violencia contra las Mujeres.
